sábado, 24 de noviembre de 2007
Nueva foto de Rodrigo
No es que pretenda monopolizar el tema de las fotos de niños, pero mientras no haya nuevas asignaciones me parece que os vais a cansar de oírme hablar de él. El caso es que el jueves pasado recibimos a las 7 de la tarde la foto de su pasaporte.
¿Soy yo? o creo que este niño ha engordado mucho desde las fotos de asignación....jajajaj. Será amor de padre...
Han llegado ya las pruebas médicas (aunque no son obligatorias, ACI siempre las solicita a un hospital privado) y Enrique (Rodrigo) o como quiera que al final terminemos llamándole está perfectamente. Solo una pequeña infección que no tiene la más mínima importancia.
El dato negativo es que el tifón del que hablé ayer en Tulay y que está asolando ahora mismo Filipinas, estaba previsto que cruzara directamente por donde está el orfanato de mi hijo. Se que han evacuado el orfanato y que seguro que estará a salvo, pero por primera vez en mi vida he sentido miedo y terror a que le ocurriera algo malo. Está claro que el vínculo afectivo con mi hijo se está formando poco a poco y ya no hay nadie ni nada que pueda romperlo...
(por cierto, el pobre sigue con una cara de asustado que me da mucha mucha pena....)
Un abrazo,
Enrique
¿Soy yo? o creo que este niño ha engordado mucho desde las fotos de asignación....jajajaj. Será amor de padre...
Han llegado ya las pruebas médicas (aunque no son obligatorias, ACI siempre las solicita a un hospital privado) y Enrique (Rodrigo) o como quiera que al final terminemos llamándole está perfectamente. Solo una pequeña infección que no tiene la más mínima importancia.
El dato negativo es que el tifón del que hablé ayer en Tulay y que está asolando ahora mismo Filipinas, estaba previsto que cruzara directamente por donde está el orfanato de mi hijo. Se que han evacuado el orfanato y que seguro que estará a salvo, pero por primera vez en mi vida he sentido miedo y terror a que le ocurriera algo malo. Está claro que el vínculo afectivo con mi hijo se está formando poco a poco y ya no hay nadie ni nada que pueda romperlo...
(por cierto, el pobre sigue con una cara de asustado que me da mucha mucha pena....)
Un abrazo,
Enrique
Etiquetas: Álbum de niños, testimonios