jueves, 26 de marzo de 2009
Filipinas aprueba el traslado a España de Larrañaga para cumplir su pena



El Gobierno de Filipinas ha autorizado que el ciudadano hispano-filipino Francisco Larrañaga pueda ser trasladado a España cuando lo solicite para cumplir la pena a la que ha que fue condenado por matar a dos hermanas en 1999.

Larrañaga fue condenado en Filipinas a cadena perpetua por un delito de asesinato. Sin embargo, como en España no se aplica esta pena máxima, aquí permanecerá en la cárcel un máximo de 30 años.

El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, anunció el inminente traslado de Larrañaga a España en una rueda de prensa en Manila junto con su homólogo filipino, Alberto Rómulo, en el marco de su visita oficial a Filipinas.

"Ya está todo terminado y concluido. Su llegada a España es muy inmediata y sólo depende ya de que él mismo o su familia decida cómo y cuándo, y nosotros lo recibiremos y acogeremos", explicó Moratinos.

El traslado a España es fruto del acuerdo recíproco sobre presos que firmaron ambos países en 2007 para el cumplimiento de penas en el país de origen.

Larrañaga fue condenado al corredor de la muerte en 2004, acusado del secuestro y asesinato de dos hermanas filipinas en la ciudad de Cebú en 1997, aunque él se declaró siempre inocente alegando que el día de los hechos estaba en Manila, a 600 kilómetros de distancia.

La decisión de la presidenta de Filipinas, Gloria Macapagal, de abolir la pena capital en 2006 permitió se le conmutara el castigo por el de cadena perpetua.

Según Moratinos, el regreso a España podría hacerse "de forma inmediata" una vez que se curse su solicitud por los cauces establecidos.

El ministro español se entrevistará mañana en Manila con la madre de Larrañaga, la filipina Margot González, a la que le dará cuenta del fin del proceso administrativo para el traslado de su hijo.

A pesar de que el convenio bilateral se firmó en mayo de 2007, la ratificación parlamentaria en ambos países y el desarrollo reglamentario por parte de las autoridades filipinas han venido retrasando el traslado.

"Ahora todo este proceso, que ha sido un proceso largo, ha concluido", dijo Moratinos, quien agradeció al Gobierno filipino el esfuerzo hecho para agilizar los trámites y poder hacer el anuncio coincidiendo con su visita a Manila.

Moratinos expresará su gratitud mañana a la propia presidenta, que ha invitado a los Reyes a visitar su país en 2010 para intensificar aún más la "excelente" amistad entre ambos pueblos. A ello también contribuye, añadió el ministro, el que el idioma español vuelva a estudiarse en las escuelas del archipiélago, después de que la presidenta Corazón Aquino la suprimiera del sistema educativo en 1987.

Para el ministro, el grado de compromiso entre ambos países permite abrir un "nuevo capítulo" en su relación, de "más responsabilidad" y con el ánimo de extender el trabajo común a todos los terrenos.

Avanzó que una de las metas durante la presidencia española de la UE en el primer semestre de 2010 será tratar de concluir un acuerdo de asociación entre Europa y Filipinas.

Uno de los escollos que ha de superar el país asiático es el del respeto de los derechos humanos, aunque Moratinos destacó algunas mejoras como la abolición de la pena de muerte.

También ofreció el apoyo de España al fin de la violencia en Filipinas, donde después de tres décadas, aún mantienen su actividad armada los musulmanes de Frente Moro de Liberación Islámica (FMLI) y de Abu Sayyaf, al que se vincula con Al Qaeda, y los comunistas del Nuevo Ejército del Pueblo (NEP).

Moratinos aprovechó la ocasión para elogiar la contribución humana de los filipinos que viven en España, con los que se comprometió a mejorar sus derechos con un futuro acuerdo de reciprocidad para que puedan votar en las elecciones municipales.

El ministro confesó estar ante "uno de los momentos más emocionantes" de su trayectoria con su estancia en Manila, la primera de un jefe de la diplomacia española desde 1997.

Subrayó la acogida "tan calurosa, amistosa y emotiva" brindada y dijo sentirse como "en casa". A ello ayudó el recibimiento a ritmo de "pasodoble" organizado por el alcalde de la capital, Alfredo Lim, quien le hizo entrega de las llaves de la ciudad.

Moratinos, procedente de Corea del Sur, comenzó su visita con un reconocimiento al pasado común homenajeando al fusilado José Rizal, uno de los padres de las padres de la independencia filipina, con una ofrenda floral ante su tumba.


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Enrique Campoamor a las 5:14 p. m. | Permalink |


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