Dolz, que realizó estas declaraciones en la clausura del Congreso Internacional Stop al Tráfico de Niños organizado por la Conselleria de Inmigración y Ciudadanía junto con Tierra de Hombre, fue la encargada de informar que la comercialización de niños y niñas es "el tercer comercio más lucrativo tras el tráfico de armas y drogas".

En el Congreso también participaron más de 30 expertos, como el especialista independiente sobre el tráfico de niños y autor del estudio ´Kids as Commodities´ o ´Child Trafficking and What to do about it´, Mike Dottridge.

Según Carmen Dolz, el Congreso Internacional constituye "un espacio abierto y plural para que las diferentes entidades promuevan la sensibilización y la acción social hacia la búsqueda de soluciones y fomentando la participación ciudadana".

En este sentido, la Generalitat ha destinado 31,5 millones de euros, a través de 232 proyectos, a "erradicar la trata infantil y a iniciativas de sensibilización a nuestra ciudadanía".

Entre las actividades llevadas a cabo por el Consell se encuentran, el proyecto subregional de lucha contra la explotación y el tráfico de niños en Burkina Faso, Costa de Marfil, Níger y Togo, de la Cruz Roja Española, el programa Xiquets en Colombia, el Plan Estratégico de Intervención de Mensajeros de la Paz, en Benin y los convenios de Ayuda Humanitaria y la emergencia suscritos con ONGD como Mensajeros de la Paz o UNICEF, entre otras.

El tráfico de niños es fundamentalmente un negocio que consiste en que niños y niñas son separados de su núcleo familiar, previo pago o promesa de un futuro mejor a los padres, y transportados a otro lugar, a veces a otro país, para explotarlos con el objetivo de obtener un beneficio económico -explotación laboral, explotación sexual, niños soldados, adopciones internacionales ilegales o tráfico de órganos, entre otros casos

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